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La voz cantante la llevó el viceministro de Economía, Emmanuel Álvarez Agis, un día después de que la resolución golpeara a los mercados, ya perjudicados por la crisis internacional.
 
"Esto no significa que los bonos se van a pesificar o se le va a recortar el valor. El único objetivo es que las empresas argentinas que tienen bonos del Estado en dólares pongan en su balances el valor en pesos al tipo de cambio oficial", explicó el funcionario en diálogo con radio Del Plata. "Se refleja el verdadero valor del bono y no las oscilaciones que tiene el mercado", agregó.
 
En los hechos, la norma de la CNV obliga a los fondos comunes de inversión a malvender sus tenencias de bonos en dólares y acciones con cotización en el exterior, ya que para la liquidación de las carteras en dólares de los fondos se deberá tomar un dólar de $ 9,41 y no lo que tenían valuado a un promedio de $ 14.
 
Álvarez Agis rechazó que la medida afecte a los ahorristas y explicó que la caída en la bolsa ayer tuvo más que ver con la crisis en los mercados emergentes.
 
"Fue un día negro y esas tensiones arrastraron a todas las bolsas. Fue una tendencia mundial. Nunca emitiríamos una medida que afecte a los títulos públicos", dijo el segundo del ministro Axel Kicillof.
 
Lo que sucedió ayer fue que las administradoras trataron de minimizar la pérdida liquidando en masa esos títulos para refugiarse en otros, aunque contaban con un plazo mayor para hacerlo. Lograron evitar reconocer pérdidas de hasta 50%, aunque no evitaron otras que terminaron promediando el 8%.
 
Hubo más de 2000 operaciones con bonos como el Bonar 2017, el Boden 2015 o el Bonar 2024, casi el triple que un día normal, lo que dejó a la vista el surgimiento de una "demanda sustituta".